La ruptura: el pasado 3 de mayo, el fundador de Microsoft, Bill Gates y su esposa Melinda anunciaron su divorcio tras 27 años de matrimonio. La pareja se conoció cuando ella se incorporó a Microsoft e iniciaron su relación en 1987. Siete años después contrajeron matrimonio en la isla hawaiana de Lanai.

• «Tras mucha reflexión y trabajo en nuestra relación, hemos tomado la decisión de poner fin a nuestro matrimonio», señalaron en un comunicado publicado en sus respectivas cuentas Twitter.
• «Seguiremos trabajando juntos en la fundación, pero consideramos que ya no podemos seguir creciendo juntos como pareja en esta siguiente fase de nuestras vidas», insistieron en el comunicado que divulgó la red social.

¿Por qué importa?: porque con el divorcio de Bill Gates (65 años) y Melinda Gates (56 años) está en juego una fortuna a repartir de casi 130 mil millones de dólares, según la revista Forbes.  Y por el impacto que esto puede tener en los proyectos de filantropía que impulsan a través de su fundación, marcando un sello indiscutible especialmente en materia de salud pública a nivel planetario.

• “La Fundación Gates es la entidad filantrópica más importante e influyente en el mundo actual”, asegura Rob Reich, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Stanford.
• Sin embargo, ellos han hecho declaraciones tranquilizadoras respecto de que nada cambiará en la organización. Han explicado que seguirán trabajando en conjunto y que el presupuesto de 50.000 millones de dólares se mantendrá intacto.
• “Si bien este es, obviamente, un momento difícil y de cambio personal para nuestros co-presidentes, ambos me han asegurado su compromiso continuo con la fundación por la que han trabajado tan duro durante los últimos 20 años”, explicó Mark Suzman, director ejecutivo del organismo en un correo electrónico que fue enviado a todos sus empleados tras el anuncio de divorcio de los Gates.

El rol de la fundación: Con un personal de 1.600 empleados y oficinas en casi todo el mundo, la Fundación Gates dona aproximadamente 5.000 millones de dólares cada año para áreas como la salud pública y el desarrollo mundial.

• Desde sus inicios en el año 2000, la organización ha gastado miles de millones para impulsar las vacunas en el mundo en desarrollo, trabajando con diversas compañías farmacéuticas.
• Una de las causas que apoyaron desde 2007 fue la erradicación de la polio salvaje en África, meta que se logró en agosto de 2020.
• El último año, la entidad dedicó 1.750 millones de dólares en la lucha contra el coronavirus. La Fundación Gates invirtió en proyectos de vacunas y también le dio forma a Covax, la iniciativa global que organiza la compra de vacunas para 92 países pobres.

Las últimas piezas del puzzle: a principios de 2020, el matrimonio Gates sorprendió a sus pares al excusarse de asistir al Foro Económico Mundial en Davos, la reunión anual de líderes empresariales y mundiales más importante del mundo, al cual la pareja nunca había faltado.

• Algunos meses más tarde, en marzo de 2020, Gates anunció que dimitía de los consejos de administración de Microsoft y del fondo de inversión Berkshire Hathaway, la compañía de su amigo Warren Buffet. Según sus propias explicaciones, dejaba esos cargos para centrarse aún más en sus esfuerzos filantrópicos.
• Según prestigiosos medios de comunicación, el mundo de los Gates habría comenzado a derrumbarse definitivamente cuando algunos miembros de la junta directiva de Microsoft cuestionaron los vínculos entre Gates y el empresario Jeffrey Epstein, que se suicidó en la cárcel en 2019 mientras esperaba un juicio por presunto tráfico de menores.
• The Wall Street Journal asegura que la verdadera razón del por qué Bill Gates habría dejado la junta directiva de Microsoft en 2020, se debe a la investigación sobre una relación romántica entre él y una empleada de la compañía. La relación extramarital fue reconocida por la actual vocera de Gates, quien aseguró que fue un affaire que ya estaba concluido.
• En esa misma línea, The New York Times asegura que Bill Gates «desarrolló una reputación acerca de conductas cuestionables en ambientes de trabajo» y que en varias ocasiones buscó relaciones con mujeres que trabajaban para su fundación o Microsoft.

Matrimonio puertas adentro: Melinda se incorporó al equipo de Microsoft como gerente de productos en 1987. Ella y Bill Gates se sentaron juntos durante una cena de trabajo ese mismo año en Nueva York. Luego de ese encuentro empezaron a salir.

• En un documental de Netflix, Melinda explicó que descubrió que Bill era metódico hasta en los «asuntos del corazón», escribiendo listas en una pizarra blanca con las «ventajas y desventajas de contraer matrimonio». Cuando Bill estaba sopesando la idea del matrimonio, “fue increíblemente claro acerca de que no se trataba de mí, sino de si podía lograr el equilibrio adecuado entre el trabajo y la vida familiar“, contó.
• Un artículo de la revista Time, titulado “El verdadero Bill Gates”, publicado en 1997, cuenta detalles sorprendentes sobre la relación que tenían ambos. Después de casarse con su esposa, Bill Gates pasaba un fin de semana largo todos los años en una acogedora cabaña en la playa de Carolina del Norte, con su antigua novia. El magnate hablaba de esas escapadas como encuentros de dos nerds que sólo pasaban un buen tiempo juntos. La mujer que asistía a esas particulares citas se llama Ann Winblad, quien ahora también está felizmente casada.
• Asimismo, ella no lo “malcrió” en la casa por ser tan rico. “Él lava los platos, lleva a los niños al colegio y saca al perro”, contó en una entrevista Melinda, en la que también relató que cada tarde dejaban sus oficinas gemelas en la fundación para cenar con sus hijos.
• Los Gates son los mayores propietarios de tierras agrícolas en Estados Unidos y tienen grandes participaciones en la cadena de hoteles Four Seasons, Canadian National Railway y AutoNation, la concesionaria de automóviles más grande de Estados Unidos, entre otras empresas.

El despegue de Melinda: lo cierto es que Melinda French Gates, quien ha decidido rescatar su apellido de soltera tras el anuncio de divorcio, había comenzado a tener un rol mucho más relevante en temas filantrópicos y en otras áreas. Hace un tiempo habría comenzado a cambiar su enfoque no sólo hacia los amplios problemas de la salud mundial y la educación infantil, sino más específicamente hacia la falta de igualdad de oportunidades para las mujeres.

• “Es cada vez más visible en la configuración de la estrategia de su fundación, resolviendo desafíos globales difíciles desde la educación y la pobreza hasta la anticoncepción y la salud”, escribió la revista Forbes, que en 2020 la ubicó en el quinto puesto de la lista de las 100 Mujeres más poderosas del mundo. Y en el ranking que elaboró de las filántropas quedó primera.
• En 2015, Melinda fundó Pivotal Ventures, «una empresa de inversión e incubación», que financia «ideas, gente y organizaciones transformacionales» para impulsar «el progreso social de las mujeres y las familias en Estados Unidos», se lee en la web de la compañía.
• “Lo que estoy haciendo con Pivotal Ventures es reunir a muchas otras personas a mi alrededor para tener grupos que trabajen en estos temas y luego también financiarlos a escala. No financiamos cosas para mujeres a escala. Y deberíamos hacerlo”, explicó en octubre de 2020 a The New York Times.
• Es su libro autobiográfico, The Moment of Lift: How Empowering Women Changes the World, publicado en 2019, habla sobre las «mujeres inspiradoras» que ha conocido en todo el mundo y sobre cómo se convirtió en defensora de los derechos de las mujeres.